Por qué cambian de color o tono los suelos de parquet o tarima maciza. En qué consiste la fotodegradación de la madera.

Zona más clara en la que había colocado un mueble
 
Es muy común encontrarnos al levantar una alfombra o mover un mueble tras cierto tiempo, que la zona tapada tiene un tono más claro que el resto que ha estado sin tapar. También es muy normal como, al hacer una ampliación o reparar una zona en una vivienda cuyo pavimento de madera lleva instalado algunos años, tenemos que el suelo nuevo es ligeramente más claro que el existente.

¿Nos están engañando? ¿Es diferente madera? ¿Será de peor calidad? Todas estas cuestiones nos asaltan y, la respuesta por parte de nuestro gremio es siempre la misma: es perfectamente normal.

La respuesta a estas y otras preguntas, sobre la variación de tono / color de una madera tapada o incluso, una recién instalada con respecto a otra que lo lleva bastante tiempo, está en un fenómeno natural que sufre la madera y también, como no, nuestros queridos suelos de parquet y tarima. Este proceso se llama «fotodegradación de la madera«.


¿EN QUÉ CONSISTE LA FOTODEGRADACIÓN DE LA MADERA DE LOS SUELOS DE PARQUETS Y TARIMAS MACIZAS?

Al igual que nuestra piel envejece por la acción de Sol, nuestra madera se ve afectada de manera parecida a través de la acción directa o indirecta de la radiación solar. Dicha radiación incide en las células de las capas superficiales, provocando la degradación paulatina de las ligninas (polímero de las paredes celulares de la madera) haciendo, generalmente, que las maderas más claras se tornen más oscuras y viceversa.

Es así como, el suelo que está tapado, parecerá siempre más claro que el que está al descubierto. De la misma forma, cuando realizamos una reparación o ampliación, la madera que se coloca, al no haber estado expuesta a la luz, estará más clara que la existente.

Pequeñas reposiciones antes de lijar la superficie

Todo esto constituye un fenómeno natural pero, siempre debemos evitar, en la medida de lo posible, la exposición directa y prolongada de los rayos solares sobre el pavimento ya que, puede afectar negativamente a su tratamiento superficial (barnizado o aceitado), debilitándolo y, haciendo que la madera quede expuesta a la suciedad, la humedad y otros agentes patógenos externos, tornando con el tiempo en un color grisáceo característico del desgaste de dicha capa. Para evitarlo, es altamente aconsejable el uso de cortinas, persinas, toldos exteriores…etc.