Tipos de rodapiés – plintos – zócalos para suelos de madera y laminados

 

El rodapié, también llamado zócalo e incluso plinto, es la pieza que se coloca después del suelo o tarima, de madera o laminada, en la parte inferior de la pared y encima del suelo, con tres misiones principales:

  • Tapar la junta perimetral de dilatación, que se deja alrededor del suelo con la pared o muro.
  • Como elemento estético.
  • Para proteger la pintura de la parte inferior de la pared de posibles roces, golpes y de la suciedad.
El rodapié, es el gran olvidado a la hora de adquirir un suelo para decorar nuestra vivienda ya que, suele estar en su mayor parte tapado por los muebles que decoran nuestra casa pero, es importante puesto que, es el remate final de la instalación. Sin el rodapié, la obra se encuentra inacabada.

Se fabrica en diversos materiales, siendo los principales los siguientes:

  • De madera maciza natural. Se instalan cuando se opta por instalar un suelo de parquet o tarima maciza flotante o clavada sobre rastreles; suelen elegirse de la misma especie que el suelo aunque, como veremos más adelante, no tiene por qué.
  • Rechapado en melamina sobre tablero base de DM. Consiste en un folio melamínico, imitación a alguna madera o lisa, pegada sobre DM (aglomerado fabricado con fibras de madera prensadas con resinas sintéticas mediante gran presión y calor).
  • Lacado sobre tablero base de DM. Para entendernos, esto significa «pintado en blanco» sobre tablero de DM.
  • Laminado sobre DM. Una especie de papel imitación a madera o liso sobre DM. Es el que suelen traer muchos suelos laminados a juego.
  • En DM crudo, para que lo podamos pintar o lacar nosotros (o el carpintero) del tono que queramos.
  • Rechapado natural sobre base de tablero aglomerado. En «cristiano», consiste en una lámina (chapa) de madera natural adherida a un tablero de aglomerado (básicamente, virutas o serrín de madera prensado).
  • Rechapado natural sobre base de tablero DM. Lo mismo que lo anterior pero sobre DM.
  • Rodapié «Finger Joint». Está formado por una lámina (chapa) de madera natural de alta calidad de 0,5 – 0,6 mm de espesor normalmente, fijada sobre «Pino Finger Joint» procedentes de talas de bosques renovables con Certificado FSC. Poseen una gran calidad y estabilidad.
  • De PVC, aluminio, cerámica, terrazo, mármol.…Existen de muchos otros materiales pero, nosotros nos referimos exclusivamente a los que se instalan junto con los suelos de madera y laminados.

Se fabrican en tiras de diferentes alturas, larguras y espesores; las alturas usuales son : 70mm, 85mm, 90mm, 100mm, 120mm, 150mm. Lo normal suele ser una altura de 85-90mm pero, si los techos son altos, a veces se optan por alturas superiores, siempre dependiendo del gusto del cliente. En espesores, lo normal es 15mm pero, también existen rodapiés de 10mm, 12mm, 16mm, 17mm… de grueso. Referente a la largura, depende del fabricante; en madera maciza, salvo que se encargue expresamente, suelen venir en largos varios; en el resto de materiales, se suelen elaborar en largos fijos a 2,1m, 2,2m, 2,4m, 2,44m2,5m…etc.

Otro aspecto importante en el que debemos fijarnos, es en el canto, es decir, en el borde superior, una vez ponernos el rodapié en la pared. Los hay de varios tipos:

  • Canto cuadrado o recto. Suele tener el canto un poco «matado» (suavizado).

  • Canto redondo.

 

  • Canto moldura. Con diferentes dibujos.

  • Pecho paloma.


¿QUÉ TIPO DE RODAPIÉ ELEGIR?

Para mí, personalmente, lo mejor es un rodapié de madera maciza natural pero, siempre que estemos hablando de un suelo (ya sea parquet o tarima) de madera; tampoco es mala opción un rodapié de «Pino Finger Joint» que suelen dar buen resultado y, son algo más económicos. No me gustan nada los rodapiés de aglomerado; suelen ser de calidad pésima y se deterioran relativamente rápido. Por otro lado, si hablamos de suelos laminados/sintéticoses preferible decantarnos por el que nos trae el fabricante a juego, que suele ser laminadoCabe resaltar, por último, que no siempre es obligatorio escoger el rodapié del mismo color o tono que el suelo, es muy usual elegirlo del tono o especie de las puertas; por ejemplo, es bastante común decantarse por unos rodapiés lacados en blanco, si las puertas son blancas o, color roble o sapelly si son de esas mismas maderas. De todas formas, como diría mi abuela, «para gustos, los colores«. Espero ver vuestros comentarios. ¡Hasta la próxima!


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